ensayo para anatomías extintas

5
9:45 p.m.
Yo hubiese querido llamar a lo que nos pasó de esa manera. Nombrarlo por primera vez y guardarlo en secreto igual que un sortilegio: imposible. Viene del pasado y llega de una voz ajena. Y cada vez que uno quiere conjugarlo en presente suena como un idioma bárbaro. Si no hay modo de decir que uno está triste por lo que ha pasado, imagina lo difícil que ha de ser nombrar lo que no pasará nunca.
Me parece triste que un título tan hermoso no me pertenezca. Ojalá lo hubiese tatuado en mi memoria para decírtelo en secreto igual que un sortilegio.

About the author

Discípulo de sí mismo, amigo de unos pocos, conocido de casi nadie. Autor de El intruso, Ilión (novela fracasada), uno o dos poemas apenas leídos y algún que otro ensayo que todavía no sabe cómo comenzar.

5 hay que todavía piden sangre:

Anónimo dijo...

el arraigo del pasado nos hace que los sortilegios no existan.
www.notenemosafasia.blogspot.com

Anónimo dijo...

el arraigo del pasado hace que los sortilegios no existan.
www.notenemosafasia.blogspot.com

BELMAR dijo...

SALUDOS ADRIANO

Sabe que lo adoro no?

Kmila dijo...

Hola, es la primera vez que leo algo tuyo, y en realidad me puso los pelos de punta, jamás había leído algo tan cierto y tan hermoso. Así que por aquí volveré muy seguido. saludos